El siete de octubre, desde las 6:30 am, unos 3,000 hombres armados de las Brigadas Ezzedin Al-Qasam del grupo terrorista fundamentalista islámico Hamás, penetraron en 30 puntos de Israel, desde Gaza y ejecutaron y acribillaron a 1,200 personas, entre mujeres, niños, ancianos de poblaciones agrícolas (Kibutz), conductores de auto y a jóvenes que participaban en un festival musical por la paz. La reacción de Israel, también sangrienta, busca eliminar toda amenaza de Hamás sobre su población. Lo mismo ocurre ahora contra Hezbolá en Líbano e Irán, el país orquestador y financista, pero también agresor....