Punto de vista

Alicia nació para que Giselle no muriera

17 de octubre de 2019

 Alicia Alonso fue una historia de amor. Trascendió a la batalla ideológica entre Estados Unidos y Cuba y llevó la cubanía al balett clásico, con vitalidad y personalidad propia.

Para los cubanos y el mundo, Alicia Alonso nació “para que Giselle no muriera” y así fue.

Dejó un legado, la escuela cubana de danza, la cual se impusó y marcó al ballet clásico de Estados Unidos, la antigua Unión Soviética y también de Europa.

En los peores momentos de la guerra fría, durante el siglo pasado, fue un puente de diálogo y bailó sin rendirse.

 

JAMES APARICIO
[email protected]
Twitter:@jamesapariciopa
Instagram:jamesapariciopadre

Contenido Patrocinado
TE PUEDE INTERESAR