Enfermedades del sistema cardiovascular
Las enfermedades del sistema circulatorio siguen siendo la principal causa de muerte en nuestro país, causando cada año un promedio de 6,500 defunciones, lo que constituye un grave problema de salud pública y requiere que avancemos hacia el desarrollo de un nuevo modelo de atención, basado en la promoción de la salud, la atención preventiva y el abordaje integral e intersectorial de los determinantes sociales de la salud.
Las enfermedades del sistema cardiovascular abarcan todas las enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos, incluidos los ataques cardíacos y los accidentes cerebrovasculares, la aterosclerosis, la cardiopatía isquémica, las enfermedades hipertensivas, la miocardiopatía y otras. En conjunto, las enfermedades del sistema cardiovascular son la causa más común de muerte a nivel mundial. En 2000, alrededor de 14 millones de personas murieron a causa de enfermedades cardiovasculares en todo el mundo, mientras que en 2019 murieron cerca de 18 millones.
Estas enfermedades tienden a desarrollarse gradualmente con la edad, especialmente cuando las personas tienen factores de riesgo como presión arterial alta, tabaquismo, consumo de alcohol, mala alimentación y contaminación del aire.
Grandes descensos en el tabaquismo; mejoras en la detección, el diagnóstico y el seguimiento; y los avances en tratamientos médicos, iniciativas de salud pública, atención de emergencia y procedimientos quirúrgicos han ayudado a reducir el impacto de las enfermedades cardiovasculares en la vida de las personas. Sin embargo, persisten grandes disparidades a nivel mundial. El impacto de las enfermedades cardiovasculares se puede reducir mucho más con una mayor comprensión y esfuerzos de salud pública. Las enfermedades cardíacas y otras enfermedades cardiovasculares son las causas de muerte más comunes, responsables de un tercio de todas las muertes a nivel mundial, un total de alrededor de 18 millones.
Las enfermedades del sistema cardiovascular forman parte de un grupo más amplio de enfermedades denominadas enfermedades no transmisibles, que se muestran en azul en la visualización. Estas son enfermedades que tienden a desarrollarse gradualmente con el tiempo y no pueden transmitirse a otras personas,1 y también incluyen cánceres, enfermedades respiratorias crónicas y otras enfermedades crónicas. En conjunto, estas enfermedades no transmisibles son la causa de alrededor de tres cuartas partes de todas las muertes a nivel mundial.
Las enfermedades del sistema cardiovascular presentan un claro aumento y constituyen la principal causa de muerte en el país, causando el 28% del total de defunciones (32,587) defunciones en los últimos cinco años.
El número total de muertes por enfermedades cardiovasculares ha aumentado a nivel mundial. En 2000, alrededor de 14 millones de personas murieron a causa de enfermedades cardiovasculares en todo el mundo, mientras que en 2019 esa cifra fue de casi 18 millones.
Este aumento se debe en parte al crecimiento y envejecimiento de la población, especialmente en Asia, así como al aumento de factores de riesgo como la obesidad y la diabetes.
Como algunas de estas tendencias continuarán en las próximas décadas (particularmente con el creciente número de personas mayores en todo el mundo), es probable que las enfermedades cardiovasculares se conviertan en una carga mayor para los sistemas de salud.
* El autor es médico.
** Fragmento del texto tomado en el sitio web: https://elblogdejorgeprosperi.com