El problema es que la Ciencia y el Arte no venden como el deporte

Los deportes son tema obligatorio en las campañas política. Los políticos deben hablar de construir estadios y canchas, mejorar gimnasios y renovar centros recreativos si quieren ganarse a la población.

Las campañas políticas son un tema de emociones, más que de razonamientos. El deporte, principalmente para las clases populares, es la única catapulta para salir de la miseria. El candidato que ilusione a la gente con mejorar la catapulta, tiene más chances de obtener un voto. Desafortunadamente, la Ciencia y el Arte no son vistos por las masas como catapultas para una vida mejor, aún cuando también lo son (y aún de mejor calidad).

El deporte saca a unos cuantos de los barrios y les da una vida mejor durante un tiempo (la vida deportiva es limitada). Las Ciencias y las Artes no solo sacan de la miseria a quienes lo practican, sino que aportan al acervo de los pueblos, que crece con cada obra y cada logro. El deporte es efímero; el Arte y la Ciencia se pueden replicar (y mejorar) cuantas veces se desee.  El deporte apela a lo físico, el Arte y la Ciencia apelan a la mente.  Ojalá le dieran a Inac y Senacyt lo que le dan a Pandeportes, quién sabe cuántas vidas mejoraríamos y  cuánto avanzaría la nación. *Periodista.