Llaman a renovar la esperanza tras un año 2025 desafiante
Representantes de distintos credos coincidieron en que 2025 estuvo marcado por dificultades sociales y económicas. Destacaron la fe y unidad como clave para afrontar el 2026
A pocos días de cerrar 2025, distintos líderes espirituales ofrecieron su balance del año y sus expectativas para 2026, coincidiendo en los desafíos sociales, pero también en la esperanza.
El arzobispo de Panamá, monseñor José Domingo Ulloa, describió 2025 como “un año exigente para Panamá y para la Iglesia”, marcado por tensiones, dificultades económicas y cansancio social, y afirmó que la iglesia ha acompañado “los dolores, los reclamos y las esperanzas del pueblo”.
Desde el budismo laico, Paul Bocanegra, subdirector de Soka Gakkai Internacional de Panamá, reconoció a Metro Libre que fue “un buen año”, aunque advirtió que la riqueza del país “no siempre llega a todos los sectores” y “suele concentrarse en un grupo pequeño”.
El pastor Orlando Quintero subrayó que persiste la indignación ciudadana por “la corrupción, la desigualdad y la falta de justicia”, situación que ha debilitado la confianza institucional.
Por su parte, el rabino Gustavo Kraselnik expresó su deseo de que 2026 “renueve la ilusión” y traiga desarrollo nacional sostenido colectivo.