Contrastes de las festividades decembrinas en Bocas del Toro
Las diferencias sociales y culturales de las poblaciones, han creado tradiciones diversas en las celebraciones que se realizan en las zonas comarcales y las que se tienen en las áreas más urbanas
La diversidad cultural y poblacional en la provincia de Bocas del Toro se ve reflejada en las celebraciones, como la Navidad. Cerca de las playas disfrutan de las tradiciones afrocaribeñas, mientras que en la región comarcal es un día como cualquier otro.
“En Bocas se realiza la tradicional misa del Gallo por la iglesia católica. El 25, se brinda comida a los visitantes. Todo es muy familiar”, explica Luis Lin Mou Sue, presidente de la Asociación del Museo de Bocas del Toro.
Al respecto, Julio Aguilera, expresidente de la Cámara de Comercio de Bocas del Toro, detalló que se realiza una “procesión coordinada por la iglesia local. Se hace el encendido del árbol de Navidad y un desfile navideño; se visten con ropa nueva y se entregan regalos en familia, a amigos y vecinos, sobre todo juguetes a los niños”.
En la región comarcal, la Navidad se vive comiendo arroz con guandú de cosecha temprana, explica Julia de Edgehill, coordinadora de misiones de la iglesia Misionera Cristo en La Roca, quienes cada enero viajan a compartir con las comunidades.
“Para ellos, del 01 al 31 de diciembre es totalmente normal, saben qué es Navidad, pero no tienen para celebrar. En pueblos como Ananay, algunos pueden tener comida propia de esta época, mientras que en la montaña la realidad es otra. Por ejemplo, una ensalada con mayonesa les hace daño porque no están acostumbrados. Ellos acuden a sus cultos que inician a las 7:00 p.m. Durante estas fechas se hacen devocionales (7:00 a.m.) y oraciones, y luego regresan a sus casas, algunos a disfrutar de los alimentos, y otros solo esperan el día siguiente porque es un día normal”, dijo De Edgehill.