La pirotecnia más buscada

Estrellitas, bengalas y los tradicionales “mata suegras” son principales en la lista de los juegos pirotécnicos más buscados para celebrar Navidad y Año Nuevo.

Los shows de fuegos artificiales suelen coronar estas fiestas y se han vuelto costumbre en barrios y residenciales de todo Panamá.

Alfredo Martínez, vendedor ambulante de pirotecnia, reiteró que estos solo deben ser vendidos a adultos, pues son una potencial arma en manos de los menores de edad.

“Las cebollitas, que explotan con menor intensidad al ser tiradas en el piso, también son muy populares, pues son más económicas y seguras”, sostuvo.

Cajas de colores y formas variadas

Cajas de luces pequeñas y grandes, de B/.8.00 hasta B/.400.00, son compradas para despedir el Año Viejo y acompañar la quema de Judas o muñecos, así lo contó Alex Caballero, propietario de la tienda Fuegos Artificiales Pantera, en Veraguas.

El experto sostuvo que: “Las piden con sonidos o explosiones fuertes, efectos especiales y demás. Estas se colocan a cierta distancia, se prende la mecha y los cartuchos se disparan solos; son el producto que más se mueve entre la clase media”.

No solo se consiguen para uso en residencias, sino también para hoteles y comercios que hacen eventos de fin de año.

Caballero aconsejó siempre comprarlos con vendedores con licencia y regulados por la Dirección de Asuntos de Seguridad Pública del Ministerio de Seguridad.

El encarecimiento de estos artefactos, explicó Caballero, ha sido consecuencia del alza a los precios de fletes.

Uso responsable

El capitán Liborio Montenegro, subdirector de DINASEPI, de los Bomberos de Panamá, explicó que lanzar los fuegos artificiales en un sitio adecuado es crucial para prevenir accidentes e incendios.

Insistió en que: “Deben colocarse en el piso o la calle, no sobre estructuras que no estén fijas. Hay que alejarlos de casas o apartamentos y cableados”.

El manejo de fuegos pirotécnicos es exclusivamente para adultos. Deben quemarse en un sitio que no represente riesgo para las personas presentes, viviendas, edificios o locales comerciales. Si los niños usan estrellitas, deben ser supervisados siempre.