La historia de la llegada de los chinos a Panamá

La historiadora y escritora panameña Berta Alicia Chen promociona sus dos últimas obras “Panamá y China. Una relación de tres siglos” y “Relaciones entre Panamá y China. Siglos XIX, X y XXI”.

Ambos serán lanzados el próximo 14 de agosto en el Salón Boquete de la Feria Internacional del Libro en Atlapa, agosto.

La autora considera que sería bueno incluir sus libros como lectura complementaria para los estudiantes que cursan los dos últimos años de secundaria y los que asisten universidad, ya que en los próximos años vendrán nuevas ofertas laborales de empresas chinas y por eso deberán conocer cómo se han dado las relaciones entre ambas naciones y las características que diferencian a ese país de los grupos económicos que han venido a invertir.

Chen contó que los escritos incluyen tanto al inmigrante taiwanés así como el chino. Además, la llegada de los asiáticos al país, las relaciones comerciales, la Guerra del Opio y la amistad entre ambas naciones.

Ambos ejemplares se encuentran disponibles en: la Librería Panamá Viejo, El Hombre de la Mancha, Farmacias Arrocha, Librería del Museo del Canal y Librería Portobelo. Los precios varían dependiendo de cada lugar donde se venda.

La escritora aseguró que sintió curiosidad por investigar y escribir los textos, ya que su padre y su abuelo vinieron de aquel país para trabajar en Panamá. Recopiló la información para que las personas conozcan parte de la historia de China, Taiwán y la de nuestro territorio.

“A Panamá llegaron tres embarques de chinos semi esclavos, ya que eran hombres libres con condiciones de esclavitud porque sus contratos eran de ocho años. A muchos los engañaban”, detalló la historiadora.

Manifestó que los tres grupos llegaron en 1852, 1853, 1854 y hubo una cuarta agrupación, la de cual no se tiene un conteo, pero en total fueron alrededor de mil 600 empleados.

La escritora detalló que durante el tiempo de la construcción del Canal de Panamá, los asiáticos instalaron 600 tiendas que incluían lavanderías, almacenes, mercancía general y refrescos, los cuales existen textos donde aparecen los nombres de los propietarios.

También, le alquilaban a los antillanos los sitios donde se quedaban como un negocio de bienes raíces. Recordó el lamentable suceso donde se suicidaron 500 trabajadores al suspendérseles el consumo de opio.

Karoline Santana
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