Iglesia pide solidaridad
El Encuentro de Obispos de Centroamérica, Norteamérica y el Caribe, celebrado en Panamá, aborda la crisis migratoria del Darién; elaboran una carta pastoral
El “X Encuentro de Obispos y Agentes de Pastoral Migratoria de Centroamérica, Norteamérica y el Caribe” tuvo como propósito de reafirmar el compromiso de la iglesia Católica y la sociedad en brindar asistencia humanitaria, acompañamiento y solidaridad a los migrantes, así como en enfrentar las causas que originan el desplazamiento forzado.
El evento, que se llevó a cabo en el Centro de Espiritualidad de Monte Alverna, Panamá, contó con la participación del Monseñor José Domingo Ulloa, arzobispo de Panamá; el Cardenal Álvaro Ramazzini, de Guatemala; Monseñor Mark Seitz, de Estados Unidos, y Padre Gustavo Meneses, Costa Rica.
Jorge Ayala, secretario ejecutivo de la Pastoral de Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal Panameña y director del Hogar Luisa, subrayó la relevancia de la reunión, que convocó a obispos y agentes Pastorales de México, Estados Unidos, Canadá, Centroamérica y el Caribe.
“Este encuentro ha funcionado como un taller para la preparación del documento, que será revisado por una comisión de obispos y se publicará durante el Adviento de este año, hacia finales de noviembre. Con ello, reforzamos el compromiso de apoyar la situación migratoria”, explicó Ayala.
Tema migración
Por su parte, Víctor Castro, referente de Migración y Refugio en la Oficina Nacional de El Salvador, resaltó la importancia de una respuesta humanitaria más coordinada por parte de la iglesia Católica.
“A través de estas iniciativas podemos unificarnos como iglesia frente al cierre de fronteras y a las políticas que no respetan los derechos de nuestros hermanos migrantes. De esta manera, juntos podremos brindar una ayuda más efectiva”, comentó Castro.