Panamá en la actualidad marítima. Parte 1

 El escenario internacional en el que las economías de más de 180 naciones del mundo se han visto diezmada por el COVID-19, irá recuperándose.

Pasada esta etapa, la economía mundial se reactivará incluyendo la actividad marítima. Panamá tiene que fortalecer sus competencias en materia de protección y seguridad marítima para las embarcaciones que usan el Canal de Panamá y tiene que modernizar sus estructuras portuarias ubicadas en las entradas del Oceánico Pacífico y Océano Atlántico.

Esto garantizará un tránsito más expedito para el trasiego internacional de la mercadería por lo que precisa que estemos a la vanguardia del transporte marítimo internacional a fin de responder y mejorar su prestigio en ésta actividad que aporta más de B/100 millones de dólares anuales al fisco nacional.

Por norma constitucional el libre tránsito por el canal interoceánico es jurídicamente responsabilidad administrativa de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), no obstante, una vez los buques cruzan la vía acuática los actos y acontecimientos que suceden a lo largo de la ruta marítima salen de la esfera de competencia de la ACP y la asume el gobierno panameño a través de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), en armonía con las reglas que rigen en el derecho internacional.

Eventos como la interceptación a buques de bandera panameña en aguas internacionales por la presunta vinculación de actos ilícitos sin la previa autorización del Estado de jurisdicción territorial, han sido procedimientos contrarios a las normas del derecho internacional, afectando el buen nombre del país marítimo por excelencia, cuando algunas de estas acciones se ejecutan sin la previa autorización de las autoridades competentes de  Panamá, vulnerando derechos y deberes de estricto cumplimiento que establecen las convenciones internacionales que rigen esta materia.

Roy F. Luna G. 
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* El autor es abogado y Licenciado en Relaciones Internacionales.