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Indígenas brasileños desafían a la selva para alertar al papa sobre suicidios

02 de agosto de 2019

EFE I Un centenar de líderes indígenas brasileños desafían desde hace días los peligros de la selva amazónica en una travesía de miles de kilómetros para alertar al papa Francisco en Perú del aumento en el número de suicidios entre los jóvenes de sus tribus. La terminal de transportes de Río Branco, la capital del estado de Acre, se convirtió desde la noche del lunes en el epicentro para la llegada de peregrinos de los diferentes estados amazónicos, quienes desde este miércoles comenzaron a desplazarse en caravana hasta Puerto Maldonado, su destino final en Perú.

Desde Río Branco, el principal centro urbano de la región, todavía serán casi nueve horas más de viaje hasta Puerto Maldonado, pasando por las ciudades brasileñas de Brasileia, en la frontera con Bolivia, y Assis, limítrofe con Iñapari, ya en territorio peruano y a 225 kilómetros de Puerto Maldonado.

La subida del nivel del Río Madeira, causada por las fuertes lluvias de enero y que amenazaron con dejar incomunicado por vía terrestre y fluvial el estado de Acre, como en 2014, no impidieron a los peregrinos católicos desplazarse por las carreteras y ríos de los estados de Rondonia y Acre hasta llegar a Río Branco.

Entre los peregrinos que comenzaron a atiborrar la terminal de Río Branco, en su mayoría con carteles y camisetas alusivos a la visita a Perú del papa Francisco, sobresalen los atuendos, adornos y utensilios de un grupo de líderes indígenas.

El pontífice, que se encuentra en Chile, visitará Perú entre el 18 y el 21 de enero, pasando por las ciudades de Puerto Maldonado, próxima a la frontera con Brasil y Bolivia; Trujillo, bastante afectada por el fenómeno climático de El Niño Costero que golpeó el litoral durante los primeros meses de 2017, y la capital Lima.

Entres los asuntos que los líderes indígenas brasileños presentarán al papa Francisco llama la atención el documento que alerta sobre el creciente número de suicidios entre jóvenes de las aldeas de las tribus amazónicas.

De acuerdo con datos del Ministerio de Salud de Brasil, divulgados en septiembre pasado, los indígenas brasileños son el grupo étnico que más muere en el país por causa de suicidio en comparación con blancos, negros y otras razas.

Por cada 100.000 habitantes indígenas en Brasil, 46 de ellos mueren por causa de suicidio, una tasa bien superior al promedio nacional que es de 32 muertes por ese motivo en la misma muestra de población.

De acuerdo con el informe, el mayor índice de suicidio entre los indígenas se presenta entre jóvenes de 10 a 19 años y el menor ocurre con los adultos entre 60 y 69 años.

Entre 2015 y 2016 el número de suicidios en las comunidades indígenas de Brasil aumentó un 18 %, con 106 casos en 2016, de acuerdo con un informe presentado en octubre por el católico Consejo Indigenista Misionero (Cimi).

Otro dato que preocupa a la población indígena es el aumento en un 18,5 % de la mortalidad infantil con niños hasta cinco años de edad en el mismo comparativo, con un total de 735 menores muertos en 2016.

En Puerto Maldonado, el papa se reunirá el 19 de enero con 3.500 representantes de comunidades indígenas peruanas, bolivianas y brasileñas, quienes expondrán los peligros que afrontan relacionados con la minería ilegal, la deforestación, la disputa violenta por tierras y el cambio climático, entre otras amenazas.

En el almuerzo con Francisco y los líderes indígenas, la comitiva brasileña entregará el documento sobre las estadísticas del suicidio en sus aldeas, comentó a medios locales Rosenilda Nunes, del equipo coordinador de la Diócesis de Río Branco.