Fotografías del ecuatoriano Carlos Endara cautivan Panamá por más de un siglo
EFE| Carlos Endara, inmigrante y fotógrafo ecuatoriano, estampó un amplio retrato de la sociedad panameña y sus orígenes que más de un siglo después cautiva por su fondo humano y la dignidad que otorgó a todo el que posó para su lente, sobre todo las mujeres, dijo la crítica de arte y curadora, Adrienne Samos.
Samos dijo en una entrevista que sigue "fascinada" con la obra de Endara y que por ello no dejó pasar la oportunidad de de ser una vez más comisaria de una exposición con sus fotografías, esta vez en el Museo de Arte Contemporáneo de Panamá (MAC) con motivo del Centenario de la Cruz Roja Panameña (1917-2017).
La exposición, que estará colgada hasta el 1 de mayo próximo, reúne unas 25 fotos que Samos rebuscó en más de 4.000 negativos originales de las colecciones de los panameños Ricardo López Arias y Mario Lewis Morgan, 18 de las cuales retocó digitalmente para ampliarlas a gran formato. Esta muestra, resaltó, "tiene toda la historia de Panamá, de su gente, de los protagonistas, los pobres y los nada pobres, líderes políticos y estadistas como Belisario Porras (tres veces presidente), Eusebio A. Morales y Ricardo J. Alfaro" entrelazada con los orígenes de la Cruz Roja.
Endara (Ibarra, Ecuador, 1865- Panamá, Panamá, 1954) trabajó sobre cámara oscura y daguerrotipo, "retrató a toda la sociedad panameña, a todas las clases sociales, a los inmigrantes, los chinos, indios y a los afroantillanos, todos querían fotografiarse con él", indicó la curadora panameña. El fotógrafo llegó a Panamá en 1886 buscando a su padre que trabajaba en la construcción del canal interoceánico, para luego fundar su estudio en asocio con el panameño Epifanio Garay, en 1888.
Entre 1899 y 1904 estudio técnicas fotográficas en París. Desde 2009, por iniciativa de Lewis Morgan, se restauró su estudio fotográfico y se convirtió en la Casa Museo Endara, en el Casco Antiguo de la capital. Samos afirmó que fue una "oportunidad tremenda" trabajar en el montaje de la exposición sobre el centenario de la Cruz Roja panameña con el MAC, para destacar la misión de esta organización y el papel de la mujer "en el desarrollo de un Panamá más justo y humanitario" tal y como aparece reflejado por el lente de Endara.
En ese sentido señaló que una de las principales protagonistas de la muestra es Matilde de Obarrio Vallarino, fundadora de la Cruz Roja Panameña, conocida como Lady Mallet tras contraer matrimonio con Sir Claude Coventry Mallet, cónsul británico en Panamá. Lady Mallet, destacó, "fue una señora que tuvo una dedicación enorme para lograr lo que logró bajo los principios fundamentales de la Cruz Roja". También, agregó, hay "una protagonista, no solo de la Cruz Roja, sino de todas estas fotos que andan por aquí, una mujer de mirada penetrante en toda su extensión que se llama Enriqueta Morales", hija de Eusebio A. Morales.
Recordó que Enriqueta fue una feminista que cofundó la Liga Femenina, que también se desempeñó como jefe de enfermeras del Hospital Santo Tomás y se mantuvo al frente de la Cruz Roja cuando Lady Mallet tuvo que viajar por su esposo. "O sea, que también se estudia a través de estas fotografías la labor de la mujer en los albores del siglo XX y cómo fue también protagonista de cambios en el Panamá contemporáneo", manifestó la ensayista y editora. "Así que tenemos el lado de la mujer, del Panamá social y del Panamá urbano" retratados por Endara, remarcó, Samos, quien reiteró que fue una ocasión de "oro" revisar todo el proceso de trabajo de Endara y poder ampliar digitalmente sus fotos para esta muestra.
Sobre este trabajo digital, dijo en tono de broma que si Endara "resucita y entra aquí se vuelve a morir al encontrarse con el detalle (nuevo) de las fotos que él no pudo ver", como "el vómito de uno de los niños que estaba paralizado de miedo (frente a la cámara), con cara de desconfianza, de hambre, inclusive de miseria". Endara, según Samos, formalmente era una persona "muy estricta" que buscaba siempre la luz, una composición geométrica y que siempre exigía que la gente se vistiera de blanco para sus fotos.
Aseguró que algunas personas que no eran pudientes y no tenían casi nada de ropa, "hicieron lo que pudieron, con camisas llenas de hueco y deterioradas" para salir lo mejor posible, por lo que "las sensaciones humanas están presentes en todas sus fotos". "Fue un enorme encanto mirar las fotos que tocó él, y observar la manera como ellos miraban, las imágenes y el mundo a través de las fotografías", expresó.
Samos dijo que esta es la quinta ocasión que le ha tocado ser la comisaria de una muestra sobre Endara, una de ellas en 2011 en la Casa América en Madrid, con motivo de PhotoEspaña, y que lo haría una vez más porque sigue fascinada con su obra. "Él es fascinante porque no solamente es un gran fotógrafo, sino que es un visionario y un hombre que miraba minuciosamente la ciudad de Panamá, sus fotos en esos tiempos son extraordinarias, hechas con un cuidado y con un amor, obviamente. Es una fuente de fascinación permanente", apuntó la curadora.