EDITORIAL: Mano dura
31 de enero de 2025
La delincuencia siempre desafía al Estado de derecho y a la autoridad.
En los últimos meses, los amigos de lo ajeno y los sicarios están retando a las agencias de la ley cometiendo asaltos y asesinados en zonas pobladas o a plena luz del día. Desde 1990 se han ensayado toda clase de planes y programas, con resultados diversos, pero limitados.
Los ciudadanos están exigiendo un cambio con una aplicación general de la mano dura contra los delincuentes, en sus diversas formas.
En los países donde se ha tomado el toro por los cuernos, los maleantes han sido arrinconados y los niveles de seguridad aumentaron.
Los panameños decentes y trabajadores, que son la mayoría, respaldarían sin dudarlo que la justicia y las agencias de la ley se dediquen al acorralamiento de los delincuentes y de sus socios.
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