Opinión

Ciudad de las Artes para nuestra juventud

20 de febrero de 2024

Como llamarada extirpadora de chabacanerías, emergió la recién inaugurada ‘Ciudad de las Artes’. Surge con la misión de sofocar el oscurantismo que mantienen postergados valores intelectuales por aquellos cuyas estridencias musicales obscenas, afectan el estado emocional. El arte musical es una joya que contrasta con gritos desaforados que incitan al desorden. La Ciudad de las Artes, es el epicentro donde erupcionará el volcán cultural cuyas cenizas artísticas se esparcirán por todo el país ....y allende los linderos patrios.

Este centro cultural era ansiado por marginados que no encontraban un sitio acogedor para sus expresiones artísticas.

Divagando sobre la misión que le compete a la Ciudad de las Artes, nos topamos con Jacqueline Sánchez Piad Herbruger, joven maestra con talento musical cuya vida transita entre los 20 y 30 años.

Jacqueline Sánchez Piad Herbruger, está entre miles de jóvenes sedientos de escenarios para desahogar el talento musical que aprisionan en mente y corazón.

Jacqueline, encanto juvenil concebida por el Dr. Serafín Sánchez y la empresaria Michelle Piad Herbruger, por vocación natural destella en el canto. Al oír sus interpretaciones quedamos convencidos que Panamá tiene tesoros artísticos ocultos que urge desenterrar para demostrar universalmente que no solo somos un atajo importante entre dos mares; tampoco tierra donde nuestra fama se demuestra a puños en un tinglado; ni pateando un balón o haciendo gemir un acordeón en tarimas faranduleras para animar jolgorios carnavaleros. Como Jacqueline, hay una extensa huerta de talentosos artistas que la Ciudad de las Artes debe cosechar para evitar que se sequen y conviertan en cascarones estériles por la indiferencia de aquellos que menosprecian y ultrajan el tesoro cultural. *Periodista.

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