Representantes de diversos países abordan estrategias contra el comercio ilícito de productos de tabaco

Alrededor de 533 representantes de diferentes países se han dado cita esta semana en las sesiones de la Tercera Reunión de las Partes en el Protocolo para la Eliminación del Comercio Ilícito de Productos de Tabaco que se desarrolla en el Panamá Convention Center, en la ciudad de Panamá.

De acuerdo con el Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Protocolo para la Eliminación del Comercio Ilicitito de Productos de Tabaco cuenta con 68 Partes (menos de la mitad de las Partes del Convenio Marco que suman 183).

Se abordan estrategias para abordar este desafío e implementar estrategias específicas e importantes con respecto a esta situación.

Cabe mencionar que el encuentro incluye miembros de las Partes en el Protocolo, países que no son Parte del Protocolo, sociedad civil, organizaciones intergubernamentales e internacionales.

Panamá contra el comercio ilícito Según información suministrada por la Autoridad Nacional de Aduana en Panamá, durante el último quinquenio se han registrado un total de 1,208 casos de contrabando de cigarrillos en todo el territorio nacional con un valor CIF (costo, seguro y flete) de B/. 51.922,467.64 y un total de impuestos a pagar calculados por B/. 52.126,163.42.

De estos casos, se han remitido al Ministerio Público un total de 50 casos (expedientes) con valor CIF de B/.36,312,299.82 con un total de impuestos a pagar calculados en B/. 42,636,885.01.

Han manifestado el compromiso y la lucha en salvaguardar la salud de los panameños reiterando a la población no adquirir, ni comercializar dispositivos electrónicos en el territorio nacional.

“Los productos de tabaco que han sido incautados por parte de la autoridad aduanera se encuentran los cigarrillos convencionales y electrónicos (vaporizadores) y todos sus componentes (saborizantes, líquidos con nicotina y otras sustancias químicas)”, detallaron.

Protocolo contra el comercio ilícito Destacan que el protocolo se elaboró en respuesta al creciente comercio ilícito de productos de tabaco, a menudo de carácter transfronterizo.

“El comercio ilícito constituye una grave amenaza para la salud pública ya que aumenta el acceso a los productos de tabaco, con frecuencia a un precio menor, lo que alimenta la epidemia de tabaquismo y socava las políticas de control del tabaco. También causa pérdidas sustanciales en los ingresos gubernamentales y, al mismo tiempo, contribuye a la financiación de las actividades delictivas internacionales”, puntualizaron.