Muerte y destrucción en Perú

Al menos 75 personas murieron y más de 700 mil están afectadas en Perú por el fenómeno “El Niño Costero”, que provoca inundaciones y deslizamientos de tierra en el norte y centro del país sureño desde diciembre pasado, indicaron ayer fuentes oficiales.

De acuerdo con el más reciente reporte del gobierno, los desaparecidos suman una veintena, 99 mil 475 personas han perdido sus viviendas y 626 mil 298 resultaron con sus hogares con daños de diversa consideración desde fines de 2016, en una de las peores tragedias naturales que ha sacudido a Perú en los últimos años. Un total de 10 mil 538 viviendas han sido destruidas por el fenómeno, mientras que 12 mil 123 están inhabitables y 134 mil 125 con daños, en particular en las norteñas regiones de Piura, Lambayeque, La Libertad y Áncash.

Las inundaciones y aludes de barro y piedras cortaron varias carreteras, por lo que la ayuda fue enviada desde Lima por aire a algunas zonas que se encuentran aisladas.
La capital peruana se encuentra sin servicio de agua potable desde hace cuatro días debido a los deslizamientos de tierra que afectaron a los centros productores del vital elemento, por lo que es posible ver largas filas de personas en Lima a la espera de camiones abastecedores.

El gobierno peruano colocó como prioridad retomar la conectividad del país (debido al corte de decenas de puentes), rescatar a las personas que se encuentran en riesgo en zonas donde hubo crecidas de ríos y aluviones y encajonar los cauces de agua.

Varias zonas del país se encuentran en “alerta roja” y “emergencia” y con orden de evacuación debido a que las lluvias seguirían por al menos un par de semanas más.
El Ministerio de Educación suspendió las clases en las escuelas de Lima al menos hasta el próximo miércoles.

Desde ayer están arribando aviones con material para los damnificados desde Colombia, Chile y Argentina.

EFE |  La policía rescató a personas atrapadas por las inundaciones.

EFE | Un puente del norte de Perú colapsó por la crecida del río Virú.