De fiesta, jamones y otros asuntos

De fiesta, jamones y otros asuntos. Resulta ser mis queridos lectores que semana tras semanas leen mis escritos.

Esta semana como todas siempre hay algo que comentar para opinar siempre con el objetivo de contribuir a una mejor sociedad, aunque la nuestra sea muy particular y con variantes que los grandes maestros de la literatura quedarían fascinados por el abundante material para inspirarse.

Pues bien vean ustedes que por ahí andan unos señores pidiendo plata para hacer fiestas, porque no quieren hacer fiesta con plata de sus bolsillos, eso sí que no.

Mejor pedir plata de las arcas del estado de los impuestos que todos a duras penas pagamos. Y nos preguntamos cual es la urgencia notoria para realizar semejante alboroto para comprar jamones para una fiesta, bueno ellos dicen, no me crean a mí que es justo y necesario que los más necesitados por lo menos la noche buena coman su jamoncito y de paso ellos quedar como buenos samaritanos.

¿Qué altruistas no creen? Me parece en mi humilde opinión que deberíamos ser algo menos altruistas y más egoístas, nada de fiestas y llenarle el estómago por un solo día a los que necesitan llenar el estómago todos los días.

Mejor invirtamos ese dinero si es que existe en programas que puedan darle las herramientas para que ellos mismo puedan generar sus fiestas de navidad y no depender de gente tan altruista.  

Me parece que es más provechoso accionar de esa manera, debemos recordar que una fiesta pasa se recuerda, pero así mismo el hambre regresa y esa no pasa permanece hasta que se pueda satisfacer.

* El autor es asesor tecnológico. 
 

Gabriel J. Perea R. 
[email protected]