No naciste para hacer de todo

Naciste para hacer algo en especial, y ese debe ser tu enfoque. Tú fuiste diseñado para ser conocido por medio de tu talento. Es ese talento el que te va a capacitar para poder realizar tu visión.

Va a abrirte camino en la vida y es mediante el ejercicio de este talento que tú vas a encontrar la verdadera realización y propósito.

Por mucho tiempo se ha reforzado la ida de que debemos estudiar eso que nos garantice un trabajo con una buena remuneración monetaria.

Sin embargo, es trascendental que seamos educados en nuestros talentos, pues son estos los que nos impulsan, las que nos conducen a nuestro propósito de vida cuando los colocamos al servicio de los demás.

Si tú eres muy educado, pero no has desarrollado tu talento y lo que te apasiona, lo más probable es que tú acabes deprimido, frustrado y agotado; tú vas a acabar odiando el hecho de tener que ir a trabajar los lunes por la mañana.

Descubre ese talento, desarróllalo, estúdialo, habla con mentores y busca conocer más y más de esa área en la cual deseas triunfar. Pueden ser las finanzas, el arte, la música, la ingeniería o la cocina, no importa la actividad.

Solo coloca todo tu esfuerzo, enfoque, determinación y compromiso en eso que más anhelas. En eso que te da más energía. En lo personal esto fue lo que me hizo pasar de una vida sin sentido, viendo los días pasar, esperando el siguiente, a una vida con propósito.  

Si tú eres una persona muy joven que estás en la escuela o en la universidad, y que estás planeando tu carrera o profesión, no hagas lo que la gente dice que te va a hacer millonario. Haz aquello para lo cual tú naciste. Es ahí donde tú vas a hacer dinero y en donde vas a sentir plenitud.

No importa qué tan grande es el mundo, siempre va a haber un lugar para ti dentro de él, una vez que tú descubras y manifiestes tu talento. Miguel Ángel invirtió toda su vida en su arte. Esta es la razón porque todavía lo recordamos a más de quinientos años de cuando él vivió.

Beethoven y Bach se entregaron completamente a su trabajo, y la música de ellos vive para siempre. Alejandro Graham Bell creyó que el sonido se podría convertir en impulsos eléctricos y que podía ser transmitido por un cable.

Nadie recuerda a toda la gente que pensó que Bell estaba loco; recordamos solamente al hombre que tuvo la visión para crear el teléfono. “Tu propósito se convertirá en tu pasión”.

Daniel Castell 
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* Coach de vida certificado en PNL (Programación neurolingüística)  & DiSC.