Responsabilidad ciudadana

Los ciudadanos a lo largo de la historia han intentan encontrar un sistema de gobierno que funcione, que sea equitativo y donde puedan satisfacer sus necesidades. Lo que han descubierto es que no existe un sistema perfecto debido a que quienes lo deben hacer funcionar son personas.

El ser humano por naturaleza es imperfecto y dado que los sistemas de gobierno dependen de las personas desde su inicio se puede prevé una tendencia al fracaso. Es imposible un sistema de gobierno perfecto si este descansa sobre el accionar de personas imperfectas.  

Por tanto, no importa cuántas veces se cambie la forma de gobierno o sus integrantes bajo el mismo sistema. Mientras los fundamentos del sistema de gobierno no se respeten, y que los dirigentes no defiendas los intereses comunes sobre los intereses personales, resultará inevitable que no se obtenga el éxito.

Sin embargo, algunos sistemas de gobierno, por la manera en la que están definidos pueden resultar menos imperfectos que otros. ¿Cuál es lo que diferencia que un sistema sea más exitoso que otros?

La responsabilidad ciudadana. Sin importar el sistema de gobierno, obviando aquellos abiertamente opresores, la diferencia sobre el éxito o fracaso de un sistema de gobierno radica en el accionar de sus ciudadanos fundamentado en la responsabilidad.  

Sin responsabilidad ciudadana es imposible esperar que los sistemas de gobierno sean éxitos o que le brinden al ciudadano respuestas a sus necesidades mas apremiantes. Si somos indeferentes o creemos que nuestra responsabilidad es solo cada cinco años no podemos quejarnos del resultado que tenemos, el éxito o fracaso esta en nuestras manos. 
* El autor es asesor en tecnología. 

Gabriel Perea
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