Tiempo de unidad y solidaridad

El COVID-19 nos ha cambiado la vida a todos. Nadie se queda por fuera, ya sea porque estamos en riesgo o porque a nivel financiero ha sido como un golpe fulminante que tendrá sus consecuencias a corto y largo plazo. Todo será diferente a partir de ahora, se quiera o no.

Empezamos a vivir nuevos tiempos que ojalá sean de una bien entendida solidaridad. Tendremos que aprender a vivir en una forma diferente durante el lapso que dure esta crisis sanitaria, hasta que retornemos a la normalidad; o simplemente, iniciemos una reingeniería que nos permita recuperarnos.

Los que pensaban que era una cuestión pasajera ya están empezando a entender que la pandemia llegó para cambiarnos, la vida.

No solo en lo económico, laboral, de salud. Y aunque pudiéramos ser frágiles, igual tenemos la capacidad de salir triunfadores. Panamá ha vivido en el pasado desafortunas de las que hemos podido volver a ponernos de pie para encarar el futuro. Tenemos la casta, el coraje y la actitud para empezar de nuevo.

No dudo que al empinarnos sobre la desgracia de hoy, todo será posible gracias a nuestra gran fe en Dios.

Aunque ahora no veamos con claridad lo que nos espera en el futuro, hemos contado con la gran valentía de un gobierno que está adoptando medidas que en estos momentos parecieran ser muy duras, pero  que al final quedará demostrado que no había otra salida si queríamos tener esperanzas de un nuevo día.

Otros países no se atrevieron a hacer lo que nosotros en función de país hemos hecho. Ahora enfrentan la mortandad y la quiebra porque sus dirigentes prefirieron el camino de la complacencia y la cobardía. La historia es la gran maestra de la vida.

Estamos escribiendo una nueva a nivel mundial. Y vale preguntarse ¿aprenderemos algo de esta experiencia? ¿Surgiremos como una comunidad más solidaria? ¿Más humana, más justa? Ese es el gran reto. Hará falta coraje y sé que lo tenemos.

 Euclides M. Corro R.
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* El autor es periodista.