Opinión

CSS: ¡ahora o nunca!

27 de enero de 2020

Todos sabemos cuáles son los problemas que enfrenta la Caja de Seguro Social; sin embargo, muchos prefieren mirar hacia otro lado como si al hacerlo pudieran buscar distancia o simplemente pretender que a otros corresponde encontrar las soluciones. Una evidente actitud egoísta.

Cuando a comienzos de 1972 se puso de moda el Sistema Integrado de Salud se llegó a la conclusión que si en la práctica el Seguro Social cargaba con el peso financiero del mismo, lo lógico era modificar la ley de la entidad y hacerla más acorde con la realidad.

Todos conocemos aquellas buenas intenciones, pero igual los resultados que se han dado con el tiempo. 

Y cómo es lógico suponer, ahora muchos prefieren alinearse en la actitud egoísta de que “los derechos adquiridos hay que defenderlos a ultranza”, aunque la conciencia íntima nos diga que la carga no es rentable ni se justifica. Muchos han olvidado que en aquel entonces solo gozaba de la salud ambulatoria y hospitalaria el asegurado; mientras que su familia (esposa e hijos) solo la atención en consultorios de la CSS. 

Y lógicamente, fue muy bueno que desde esas reformas los beneficios hospitalarios se extendieran al resto de la familia (esposa, hijos e incluso, a los padres del cotizante). Igual resultó agradable que la cobertura se ampliara hasta la edad de los 25 años de los hijos si eran todavía estudiantes universitarios.  

Cierto es que más tarde se aumentó la cuota obrero-patronal y también la edad de jubilación tanto a los hombres como a las mujeres, pero nada de esto ha sido suficiente. Es impostergable revisar el sistema y sus costos.

A la par, en la parte administrativa se impone acabar con la politización de la CSS que se ha convertido en un monstruo burocrático con una innecesaria cantidad de funcionarios.

También hay que cambiar la junta directiva que es cómplice de la situación, y entender que si queremos mantener el sistema, todos tendremos que apretarnos la correa antes que sea demasiado tarde.

* El autor es periodista. 

Euclides Corro 
[email protected]

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