¡Viva las feministas civilistas!

Durante la época de la dictadura, las mujeres panameñas siempre estuvieron en las primeras filas de cada manifestación civilista protestando con pito y paila frente a barreras de “Doberman” armados de pie a cabeza arriesgando sus vidas para cambiar el rumbo de Panamá. Gracias a la valentía de esas mujeres anónimas, hoy día gozamos de un país mucho mejor, que se ubica entre las primeras economías de la región.

Ahora podemos expresarnos sin miedo de ir al exilio, a la cárcel o a la muerte. Ese fue el legado que las feministas panameñas dejaron en la historia de nuestro país. Me preocupa que las mujeres jóvenes, que no vivieron esos tiempos y que tampoco lo aprendieron en la escuela (por negligencia del sistema educativo), se dejen llevar por esta nueva ola feminista, el cual cada vez toma más y más auge en nuestros países.  

La mayoría ignora que las líderes de estos movimientos reclutan mujeres con luchas legítimas como evitar las violaciones, pero cuyo propósito real es un fin político de izquierda que promueve discordia y divisionismo entre hombres/mujeres, estado/mujeres, iglesia/mujeres llamándolo el patriarcado opresor. Y a ti, joven mujer, te digo que si crees que este movimiento está “cool” y de moda y estás pensando en participar, te pido que por lo menos investigues todos sus enunciados (no solamente el tema de las violaciones) y la relación de movimientos como estos con el Foro de Sao Paulo.

Solo después de investigar a fondo, decides seguir apoyando este movimiento, estarías en todo tu derecho de hacerlo libremente, pero gracias a esas feministas valientes que arriesgaron sus vidas sin necesidad de victimizarse para que tuviéramos el Panamá de hoy, imperfecto pero con la libertad de creer, hablar, escribir, pensar lo que quieras y sin miedo de hacerlo.

* La autora es empresaria. 

Denise Arosemena de Carrizo
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