Opinión

Diabetes y las bebidas azucaradas

24 de noviembre de 2019

Las bebidas azucaradas probablemente pueden ser consideradas el enemigo Público número uno de la salud mundial. Su consumo se había incrementado exponencialmente a raíz de Las Guerras mundiales y otros conflictos, así como al desarrollo de las modernas técnicas de mercadeo que permitieron influir en la mente del consumidor de una manera nunca antes vista. 

En los Estados Unidos, el consumo anual de bebidas azucaradas se eleva a un poco más de 32 galones, lo cual se replica con bastante aproximación en países como México y es en estos países en donde se ve el enorme crecimiento de los casos de obesidad hipertensión y diabetes mellitus. Puesto que la diabetes mellitus tiene como uno de sus factores de riesgo a la obesidad, algo que comparte también la hipertensión. 

Debido al inmenso poder de influencia de las compañías que producen las bebidas azucaradas, es difícil establecer prohibiciones a su fabricación y venta;  máximo cuando los gobiernos derivan una buena parte de impuestos de las actividades de ellas y también estas compañías aducen ser grandes fuentes de empleo. 

Sin embargo, debido al gran ataque de las epidemias de transmisión social como la diabetes, el mundo entero ha empezado a buscar estrategias para lograr reducir el consumo de bebidas azucaradas por el público y dentro de esto algunas de las que más resultados ha brindado ha sido aumentar impuestos al consumo de estas medidas. 

Solamente en México, en los últimos años, el haber colocado impuestos mayores a las bebidas azucaradas, llámense sodas, redujo en 6% la obesidad infantil y los casos de diabetes en adultos jóvenes.

Aún está por ver lo que el futuro nos depara de beneficios de esta medida. 

Escuela para Diabéticos, cupos al 229-5455.

Dr. Edgardo Gaitán
[email protected]
Instagram: @doctorgaitan

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