Sinsabores de la tecnología

Aunque es cierto  que la tecnología nos facilita la vida, pero no podemos dejar que nos rija por completo. Tenemos que recordar que esta tiene un margen de error, por lo que nuestra lógica y sentimientos no pueden centrarse por completo en ese mundo interactivo.

Es impresionante como muchos duermen su razón y le dejan todo a las nuevas aplicaciones digitales, entonces, cuando se ven sin ellas, son incapaces de coordinar funciones tan básicas como trazarse una ruta en automóvil en la ciudad o, incluso, conocer  e interactuar con personas sin una red virtual de por medio.

 Las innovaciones están para ayudarnos, es cierto, pero hay que evitar la pereza mental; más bien, usarlas para agilizar la mente.

 No podemos permitir que ellas coarten nuestra creatividad y mucho menos,  que nos aíslen de nuestro entorno o nos pongan en peligro.

La asiduidad a esta herramienta  es un mal que aqueja a gran parte de la juventud, por lo que los padres deben estar alertas, y en vez de comprarles el último artículo del mercado, deberían poner a trabajar el ingenio de sus hijos o evitarles el sedentarismo con deportes al aire libre.  Quizás así, tendríamos menos codependientes y más creativos.

Eliened Ortega
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*La autora es periodista.