Editorial

EDITORIAL: El conflicto comercial con Colombia

14 de agosto de 2019

 La estrecha relación existente con Colombia en materia comercial hace que las decisiones de un país repercutan necesariamente en el otro, especialmente cuando, en nuestro caso, las del vecino impactan de manera tan importante la actividad de la Zona Libre de Colón (ZLC), eslabón estratégico de nuestra economía.

Una vez más dicha relación se tensa en perjuicio de nuestros intereses cuando Colombia, a través de decreto reciente, reglamenta la entrada en vigencia de los aranceles aprobados en su Plan Nacional de Desarrollo, con un incremento entre el 15% y el 37% para la confecciones si el precio FOB declarado es inferior o igual al 20%, así como un arancel del 10% ad valorem, más tres dólares por kilogramo bruto a las que tengan precios por kilogramo superiores a 20 dólares.

La medida es rechazada con justa razón por los usuarios de la ya deprimida zona franca, los cuales piden del gobierno acciones enérgicas de retorsión.

También se trata de un tema que ha pasado por las manos de varias administraciones sin que se hayan obtenido soluciones duraderas para Panamá.

Es hora de actuar con entereza en correspondencia idéntica con nuestros objetivos de desarrollo, pero teniendo en cuenta que lo menos aconsejable es generar sobresaltos, cuando pretendemos reactivar nuestra economía.

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