Evasión del hogar, una alerta de consideración

 La supuesta desaparición de una joven el fin de semana pasado avivó la conversación sobre estos casos en el país y las circunstancias en las que se originan.

Conforme a la teniente Abdisielmi Pineda, del Servicio Policial de Niñez y Adolescencia, los casos de menores de edad evadidos del hogar han aumentado en el último año, particularmente en los que están involucradas féminas.

Ante una denuncia de escape, dijo Pineda, ya no se esperan 24 horas para iniciar la búsqueda entre amistades del adolescente en cuestión.

En caso de comprobar que este es maltratado, se tramita la custodia del menor a un familiar o entidad, a través de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (Senniaf). 

Luego, la investigación pasa a manos de la Fiscalía de Familia.

Un desenlace común es que el o la joven haya huido con algún pretendiente adulto, lo cual es prohibido y acarrea una sanción.
 

Comunicación en la familia
Para la psicóloga Rodsella Aragundi, se trata de una situación seria en la que hay que preguntarse si el infante escapa porque no se siente seguro. Según la experta, en estos escenarios podría haber violencia intrafamiliar activa. 

No obstante, podría tratarse simplemente de disconformidad con las reglas que los tutores imponen bajo su techo.  
Aragundi explicó que: “No siempre es indicativo de que hay un riesgo, pero sí es una manera de manifestar que hay algún conflicto con los progenitores”.

La orientación sexual ahora también detona los enfrentamientos con los padres, lo que es lamentable pues “en las familias nadie tendría que sufrir exclusión”, de acuerdo a Iván Chanis Barahona, presidente de Fundación Iguales.

Eliened Ortega Yángüez 
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